Perfumista Nathalie Feisthauer

Desde que sus sentidos despertaron al mundo de las fragancias, Nathalie ha llevado consigo una pasión inquebrantable por los aromas que la ha impulsado a seguir su destino como perfumista. Su viaje hacia la cima de la industria del perfume comenzó cuando se cruzó con la cautivadora esencia de Opium de Yves Saint-Laurent, un momento que marcaría el inicio de una carrera excepcional.

En un mundo donde la perfumería estaba dominada por tradiciones familiares y una estricta guilda en Grasse, Nathalie desafiaba las convenciones. En 1983, con su carácter apasionado y extrovertido, se convirtió en la primera aprendiz sin antecedentes familiares en entrar en el prestigioso programa de la escuela de perfumería Roure, ahora conocida como Givaudan. En ese entonces, los nuevos aprendices solo provenían de Grasse, lo que hacía que su camino fuera aún más extraordinario.

Nathalie encontró su lugar en Nueva York, donde su carrera despegó en Estée Lauder. Aquí, se sumergió en el estilo estadounidense, abrazó la energía, la diversión y la artimaña de marketing. Esta experiencia cosmopolita enriqueció su visión creativa y la transformó en una perfumista versátil y audaz.

A lo largo de su carrera, Nathalie no se limitó a una sola marca. Desde marcas comerciales hasta nicho como Etat Libre d'Orange, y desde icónicas como Hermès y Cartier, todas encontraron en Nathalie a una creadora apasionada y talentosa. Su amor por la diversidad de marcas siempre ha impulsado su creatividad.

Con más de 30 años de experiencia en grandes empresas como Givaudan y Symrise, Nathalie se ha ganado un lugar destacado en la industria del perfume. Sin embargo, su búsqueda de libertad, autenticidad y pasión la llevó a escribir un nuevo capítulo como perfumista independiente.

En Montmartre, enclavado en su propio laboratorio independiente ubicado en una antigua galería de arte, Nathalie fundó LABscent. Aquí, la libertad y la creatividad fluyen sin restricciones. Su reputación internacional y sus creaciones emblemáticas le han permitido componer fragancias innovadoras para las marcas de nicho más exclusivas en todo el mundo, desde América hasta Dubái, Rusia y Europa, llegando a más de 30 países en total.

Los reconocimientos a su talento han sido numerosos, desde el premio FIFI de Perfumista del Año en 2019 hasta premios por sus creaciones notables como Nomenclature - fluo_ral, Sous le Manteau, Burdin - Amoroso y L'ORCHESTRE parfum - Electro Limonade. Cada premio es un testimonio de su habilidad para cautivar a los amantes del perfume nicho en todo el mundo.

Nathalie es mucho más que una perfumista; es una narradora de historias a través de las fragancias, una artista que traduce emociones y experiencias en esencias inolvidables. Su viaje en busca de la excelencia y la innovación continúa, y su nombre se ha convertido en sinónimo de pasión y creatividad en el mundo del perfume.