Odoon Eau de parfum 50 ml
165,00 €
330 € / 100 ml
Stock: Agotado
SKU
121763
Perfil olfativo Odoon
Perfil olfativo Uso
Familia
Amaderada
Subfamilia
Amaderada
Notas cabeza
Cedro, Madera de Guaiac, Almizcle, Roble, Pimienta, Pino, Sándalo, Vainilla, Resinas, Humo, Ceniza
Notas corazón
Cedro, Madera de Guaiac, Almizcle, Roble, Pimienta, Pino, Sándalo, Vainilla, Resinas, Humo, Ceniza
Notas base
Cedro, Madera de Guaiac, Almizcle, Roble, Pimienta, Pino, Sándalo, Vainilla, Resinas, Humo, Ceniza
Género Unisex
Temporada Otoño / Invierno
Ocasión Relax
Longevidad
Estela
Descripción
Odoon es una declaración radical de amor por la madera, una composición que se aleja por completo del concepto decorativo o comercial de lo “amaderado” para adentrarse en una experiencia sensorial más cruda, profunda y evocadora. El nombre mismo, que significa “madera” en turco, ya anticipa su intención de ir directo a la materia prima. La salida es austera, densa y ahumada, con una fuerte presencia de ceniza, resinas y un leve toque especiado de pimienta que aporta tensión.
La sensación inicial puede recordar al olor del bosque después de una hoguera apagada: madera negra, raíces húmedas, corteza quemada. Esta no es una fragancia “limpia” ni fácil; es salvaje y pura. Con el paso del tiempo, el perfume evoluciona hacia un territorio más cálido.
Aparecen las maderas nobles —cedro, sándalo, guaiaco— que aportan profundidad, estructura y una textura más untuosa. El almizcle y un leve fondo de vainilla suavizan el conjunto sin alterar su esencia rugosa. Todo se mantiene contenido, seco y misterioso.
Odoon no busca agradar a todo el mundo. Es una fragancia introspectiva, casi meditativa, pensada para quienes valoran la perfumería como arte, no como adorno. Cada una de sus fases transmite autenticidad y carácter, con una narrativa olfativa que evoca silencio, naturaleza, materiales crudos y contemplación.
La sensación inicial puede recordar al olor del bosque después de una hoguera apagada: madera negra, raíces húmedas, corteza quemada. Esta no es una fragancia “limpia” ni fácil; es salvaje y pura. Con el paso del tiempo, el perfume evoluciona hacia un territorio más cálido.
Aparecen las maderas nobles —cedro, sándalo, guaiaco— que aportan profundidad, estructura y una textura más untuosa. El almizcle y un leve fondo de vainilla suavizan el conjunto sin alterar su esencia rugosa. Todo se mantiene contenido, seco y misterioso.
Odoon no busca agradar a todo el mundo. Es una fragancia introspectiva, casi meditativa, pensada para quienes valoran la perfumería como arte, no como adorno. Cada una de sus fases transmite autenticidad y carácter, con una narrativa olfativa que evoca silencio, naturaleza, materiales crudos y contemplación.