Mancera

En el año 2008, nació la Casa Mancera, dando inicio a una colaboración única y excepcional entre un padre, Pierre Montale, y su hija, Amélie. Juntos, comenzaron un viaje en el mundo de las fragancias que marcaría el comienzo de un proyecto multigeneracional destinado a romper barreras y conquistar los corazones de los amantes de los perfumes. Pierre Montale, un viajero empedernido del Lejano Oriente, trajo consigo un conocimiento ancestral que le fue transmitido en los rincones más oscuros de los talleres de los maestros perfumistas. Con un profundo respeto por las tradiciones orientales, Pierre Montale se convirtió en el fundador de Mancera, un nombre que desde entonces se ha asociado con la excelencia y la innovación en la perfumería. Amélie, por otro lado, aportó su visión artística y su pasión por el Art déco, junto con su amor por las fragancias que la habían rodeado desde su infancia. Como fotógrafa y artista visual visionaria, Amélie fusionó las artes gráficas con el diseño olfativo, creando una obra que resistiría el paso del tiempo. La pureza y la geometría inspiraron tanto la creación de los elixires como el diseño de las cajas cristalinas que los albergan. Mancera no se limita a inspiraciones occidentales u orientales, sino que es el resultado de una colaboración familiar única donde cuatro manos trabajan en armonía.

Esta sinfonía produce una danza sinestésica, una experiencia visual y olfativa que te lleva a las tierras más remotas, donde nacen los mitos y se esboza el futuro. Mancera ofrece la estética típica francesa de una perfumería excéntrica y extraordinaria, fruto de inspiraciones lujosas y un perfeccionismo innato. Pierre Montale siempre soñó con crear una línea que evocara la pureza de la forma de la fragancia, la estilización de los diseños y la riqueza de los materiales de los frascos. En busca de un look moderno, Mancera abraza el baño de oro, las maderas de Macassar y las incrustaciones de nácar o metal, como el oro, el cuero y el latón, que abrazan los lujosos colores orientales de las botellas. Es un homenaje al refinamiento francés, diseñado para el hombre que viaja entre tierras lejanas y su tierra natal. En mayo de 2015, Mancera encontró su lugar cerca de los Campos Elíseos en la lujosa boutique de Montale.

Este no fue solo un paso más en la historia de la marca, sino el inicio de un sueño oriental compartido por Pierre Montale y Amélie. Juntos, han creado un lugar mágico que ofrece una experiencia inmersiva que te lleva a un viaje por las bellezas y maravillas del mundo oriental.  Mancera es mucho más que una marca de perfumes; es una expresión de la pasión, el arte y la dedicación de una familia que ha llevado la perfumería a nuevas alturas. Es una celebración de la excelencia, la creatividad y la unión de tradiciones orientales y occidentales. Con Mancera, cada fragancia es una obra maestra que te transporta a un mundo de belleza y maravilla.